Esta lechera nos la regalaron llena de bombones y cuando los terminamos me imagino que la habríamos guardado porque tenía una forma muy bonita y nos daría pena tirarla pero la verdad es que ya ni me acordaba que la teníamos.
Cuando la ví me llevé una gran alegría porque me pareció una buena candidata para pasar por mi "salón de decoupage".
En estos casos, me gusta poner el antes y el después porque así se puede apreciar mejor la transformación y valorar el resultado.
Cuando la ví me llevé una gran alegría porque me pareció una buena candidata para pasar por mi "salón de decoupage".
En estos casos, me gusta poner el antes y el después porque así se puede apreciar mejor la transformación y valorar el resultado.
Le tuve que dar por lo menos cuatro manos de imprimación porque tenía las letras y flores características de esta marca de bombones en relieve y no había forma humana de ponerla un poquito lisa para poder pegar la servilleta.
Después la pinté en color blanco antiguo, le pegué las flores recortadas de una servilleta y haciendo uso de la receta de mi amiga Nati del blog Rosas y Lilas le dí dos manitas de alkil como primer componente de craquelador y tras dejar que se secara bien le apliqué una mano de craquelador Vallejo para que actuara como segundo componente.
A Nati haciendo así el craquelado le queda espectacular (bueno, a ella utilice el craquelador que utilice le queda perfecto porque tiene una mano que es increible) pero a mi lechera no le veía una grieta ni mirandola con lupa.
Resignada a que no iba a craquelar, le apliqué una manita de patina con el fin de envejecerla un poco y cual fue mi sorpresa cuando al aplicar la patina ví que grietas sí que tenía pero superminúsculas y muy irregulares, vamos que como para verlas.
Creo que el problema puede ser que le apliqué las manos de alkil demasiado diluidas (en mi próximo craquelado se las aplicaré más densas para probar si es este el fallo).
En fin, que como esta ya no tenía remedio porque con tantas manos de productos está más maquillada que una puerta, le retiré la patina con un paño de algodón y le dí una mano de barniz mate para darle un mejor acabado.
La he puesto sobre la tele y la verdad es que como la forma es bonita y como las flores de la servilleta son preciosas le miro y le remiro y después de todo me parece que no ha quedado mal del todo.
Con unas florecitas que me sobraron de la misma servilleta, he hecho decoupage a un bote de propanganda para guardar lapices y bolis.
Y!!!!!!! el resultado final es bellisimo
ResponderEliminarbesos y buen fin de semana
A mi me gusta mucho como ha quedado, me encanta el motivo que has elgido te ha quedado muy fina.
ResponderEliminarBesos.
Oskia te ha quedado monísima, yo tengo una pintada a mano por mi hermana igual que esa, ya la pondré en el blog.
ResponderEliminarBesitos guapa
Pues claro que ha quedado bien. Bien bonita. Un buen cambio que le has dado. Besos.
ResponderEliminarUna hermosura de lechera!!! Que más quisieran las vacas suizas...!!!
ResponderEliminarHola, soy Carmencita de Zaragoza. He encontrado tu blog de casualidad u me ha encantado todo lo que he ido viendo.
Tienes unos trabajos lindísimos... así que me he hecho seguidora tuya para no perderme más trabajillos...
Te espero en mi blog
http://revesdesjumelles.blogspot.com/
Besicos desde Zaragoza
Carmencita